Piedras de Capricornio
El hipogrifo es una mezcla de las bondades de todas las criaturas de la Creación: tiene alas, cuerpo de cabra, cola de sirena y garras de león. Aire, Tierra, Fuego y Agua se conjugan en los nativos de este signo. Capricornio se distingue, por ello, por su mesura, su tranquilidad, su discreción, por nunca decir una palabra de más ni de pronunciarla en el tono equivocada. Son los mejores amigos y parejas, pues se adaptan soberbiamente a toda situación y a cualquier ambiente.
Su problema es que viven en voz baja, y rara vez dicen lo que sienten y desean realmente, y dejan que los demás decidan por ellos.
¿Qué piedras preciosas son las más adecuadas para el signo del hipogrifo?
Obsidiana, granate y zafiro: Estas tres piedras preciosas forman una tríada que favorece las bondades de los nacidos bajo el signo de Capricornio. Su sabiduría, su don de gentes, su entereza. Y no sólo eso: también fortalecen aquello que necesitan y explotan poco. Su capacidad de liderazgo, su carisma, su sensualidad, su intuición… y sobre todo su confianza en sí mismos.
Estas gemas van a hacer de cualquier Capricornio una persona que sabrá combinar la bondad con la ambición, y con esas habilidades conjuntas creará espacios de bienestar para aquellos a los que ama.
Obsidiana. Este cristal volcánico, nacido en las ardientes entrañas de la Tierra, aporta a los serenos capricornios un toque de pasión y de confianza. Oscura y brillante, esta piedra preciosa insufla fiereza y ambición en personas que habitualmente prefieren quedarse en la discreción de segundo plano, donde no reciben atención y reconocimientos. Gracias a la obsidiana, los tranquilos nativos de este signo se convertirán en capitanes de su propio destino, lejos de la zona de confort.
Granate. Una roca que se relaciona con la pasión y la seducción, y que hace del Capricornio que la ostenta una persona más segura de sí misma, que sabe demandar lo que desea y que recibe lo que merece por sus méritos y trabajo. Apenas y este cristal de color rojo toque a un nativo del signo del hipogrifo, y su encendido color rojo hará de él centro de las miradas y de los dones.
Zafiro. La piedra de los sueños es una de las mayores fortunas que un Capricornio puede recibir, pues se trata de una bella gema que potencia la intuición, pues abre la puerta de lo que se conoce como tercer ojo. Los sueños, la precognición, la profecía… Los dones que desde tiempos ancestrales se ha ligado a Capricornio tendrán lugar en su vida gracias al zafiro.