El Sumo Sacerdote (En el amor)
La carta del Sumo Sacerdote nos habla, básicamente de una persona masculina en la vida del consultante. Es posible que haya relaciones con personas más mayores y con una gran diferencia de edad, algo que le va a ir de maravilla a la persona que consulta sobre las relaciones.
En caso de personas que no tengan pareja, esta carta nos habla de un amigo íntimo que se preocupa mucho de esta persona y que está dispuesta a darlo todo por su bienestar. Es una relación que puede empezar en cualquier momento, pero que, para hacerla funcionar, será necesario que ambos pongan de su parte, pues la diferencia de edad es algo que se puede solucionar con mucho diálogo y comunicación. Las relaciones, eso sí, serán de lo más cálidas y muy constructivas, sobre todo, si uno no opaca al otro. Es una relación en la que los dos se deben nutrir de los dos.
La Rueda de la Fortuna (En el trabajo)
Es un buen momento para replantearnos el trabajo y las tareas que llevamos a cabo en la empresa en la que estamos. Si buscamos cambios, esta carta nos dice que estos llegarán, pero que también debemos hacer un esfuerzo para que estos sucedan. Es una carta muy positiva que nos anima a hacer todos los cambios que tenemos en mente, pues el resultado siempre será positivo. Las nuevas ideas que tendrá el consultante serán de lo mejor recibidas en todos los aspectos, por lo que es esencial que sepa qué es lo que la empresa busca para aportar estas ideas, soluciones y creatividad.
Con los cambios, llegarán buenos y mejores momentos en el dinero. Los esfuerzos que vamos a hacer serán positivos también en la economía, de modo que el resultado también es de lo más positivo. Por otro lado, es también posible que tengamos algo de suerte en el azar, por lo que podemos probar.
El Ermitaño (En la salud)
Probabilidad de enfermedades, sobre todo, si el consultante es una persona joven. La carta no nos dice que esta esté enferma en el momento de la consulta, pero sí que tiene una gran cantidad de probabilidades de enfermar en breve si no mejora en sus cuidados. Es por ello que si nos aparece esta carta es esencial recurrir de inmediato a un médico que nos haga una revisión completa para descartar posibles problemas de salud. También debemos extremar los cuidados tanto en la alimentación como en el deporte y, sobre todo, necesitamos tener unos buenos hábitos en general.
Si el consultante es una persona mayor, la carta del Ermitaño le indica que necesita extremar los cuidados, pues la salud está frágil y puede tener recaídas. En este caso, no es tan fácil cuidarse, pues la edad es la edad y no tiene cura, pero sí nos avisa de hacer cuanto podamos para la salud, sea yendo al médico cuando nos toque, no olvidarnos de la medicación y no cometer abusos en cuanto a la alimentación.